Locura

Un escalofrío recorre mi memoria

no hay resquicio por donde entre la esperanza;

hipotético futuro que solo ofrece incertidumbre.

No se calman los fantasmas que me acechan

ni los miedos que sin medida me torturan,

hay un demonio que perturba la mente

que empuja al silencio para que aúlle en la noche.

Escucho una campana en la lejanía 

que sin clemencia grita mi nombre

y un poema escrito en la arena

mientras las olas vomitan mi sangre

Espinas clavadas en la memoria

 

No es fácil la palabra

cuando hay promesas rotas

o cuando las lágrimas de la luna

se nos antojan perlas de una pulsera.

 

Avanza el día y me pierdo por la ciudad

los zapatos muerden mis pies

y una gota salada empapa el paso;

precisa instantánea en blanco y negro.

 

Los poemas de amor son un refugio sanador

para quien lo sufre en soledad

mientras tanto, siembro memoria para recoger recuerdos

que emergen de entre la niebla como una gran muralla.

 

Perfilo versos en el esqueleto de los poemas

aderezo las palabras para sanar heridas

y tramo poesías para cruzar la senda hacia las utopías;

instrumento de transformación.

Con hilos de hilván

Sumergida en la niebla

me arrastra la caricia de la desventura

mientras abrazo el abismo del dolor.

La memoria cose la vida con puntadas quebradizas

donde los recuerdos se tambalean

en el columpio de los días pasados

y el rostro desencajado del tiempo, contempla con estupor

que el futuro, es una quimera.

Solo el presente nos ancla a la tierra; aunque con hilos de hilván.

Desde el ático de la mentira

Miras de soslayo y una media sonrisa asoma

dejando al descubierto unos dientes de hiena insatisfecha

Tomas prestada hasta la última gota de sangre

con la que harás el negocio de tu vida

Te beberás el sudor de tu hermano

mientras oteas la escalera

por la que subir a la pirámide

Aniquilarás los sueños 

que como cristales rotos 

atravesarán la memoria de los inocentes

y luego...

rendirás las cuentas, cuando apiñadas 

en el balance de tu innoble vida

recauden la vergüenza necesaria para esquivar la venganza

Trampas

Un crujir de piedras en el corazón del miserable 

para estampar las sombras en la esperanza anhelante. 

Solo se ven nubes negras que ensombrecen la sonrisa 

mientras la tarde impasible nos sirve una mirada esquiva 

¿cómo soportar la deslealtad y aguantar la hipocresía 

si se detesta la mentira 

y estamos hasta el moño de tanta injusticia?  

La vida es una comedia 

donde cada personaje finge tener el alma limpia; 

pura artimaña en teoría.

Con piel de lana

 Embrujados, embriagados, 

encantados de haberse conocido

cuando "ellos" se miran al espejo

se quieren, no muestran fisuras,

nada les complace más 

que regodearse en su propia desvergüenza.

Sus ojos solo ven lo que quieren ver, lo que no molesta,

lo que no duele ni interfiere en su escalada

observan desde arriba, 

no les importa la desnudez de la miseria

el hambre de los que claman

el desamparo de los que lloran.

En tus manos

 Puedo ser la luz de la mañana

o una sombra posada en la almohada

herramienta que solícita aturde la presencia de una mariposa

o tal vez...

el vehículo que sigiloso recorre el camino hasta tu alma.

Puedo ser manantial que apaga la sed de tu desdicha

o el pozo seco y oscuro donde muere tu inocencia.

En tus manos...

puedo congelar el calor de tus caricias

y abrasar el hielo que destella tu mirada.

Puedo ser la vida, el llanto, la sonrisa o la nada,

trozo de cristal roto en pedazos

pieza de ese puzzle que nunca encaja,

hacedora de palabras en una novela fantasma

agua desbordada entre los dedos

y tierra albergada en la garganta.